Vamos con la segunda parte de Snake Eater en una calidad suprema que solo el compańero Cratosxp puede ofrecernos, y es que tenemos la suerte de que le gusten todo tipo de géneros y que se haya ofrecido a publicarlas en esta web. Como ya sabeis, esta trilogÃÂÂa fue una de las primeras incursiones de Lorenzo Lamas en el cine de acción, y lo hizo con gran acierto demostrado que tiene carisma para hacer de tipo duro.

Sinopsis:
Un duro agente de policÃÂÂa, apodado por sus compańeros Snakeeater, ha sido suspendido durante un largo periodo de tiempo de su cargo en el departamento por los métodos poco ortodoxos y al lÃÂÂmite de la ley que utiliza en la lucha contra los traficantes de droga. A pesar de estar despojado de su placa y de su arma reglamentaria, el hombre intenta ayudar a un grupo de jóvenes drogadictos y es entonces cuando acude al departamento de policÃÂÂa para pedir ayuda porque está circulando droga envenenada. Pero sus superiores se inhiben del caso. Entonces Snakeeater, que utiliza sus propios métodos, pasa a la acción, y prepara la más feroz venganza contra los hasta entonces intocables capos de la droga y su peligrosa organización. Finalmente los superiores del policÃÂÂa tendrán que reconocer su hazańa.

Sinopsis:
Un duro agente de policÃÂÂa, apodado por sus compańeros Snakeeater, ha sido suspendido durante un largo periodo de tiempo de su cargo en el departamento por los métodos poco ortodoxos y al lÃÂÂmite de la ley que utiliza en la lucha contra los traficantes de droga. A pesar de estar despojado de su placa y de su arma reglamentaria, el hombre intenta ayudar a un grupo de jóvenes drogadictos y es entonces cuando acude al departamento de policÃÂÂa para pedir ayuda porque está circulando droga envenenada. Pero sus superiores se inhiben del caso. Entonces Snakeeater, que utiliza sus propios métodos, pasa a la acción, y prepara la más feroz venganza contra los hasta entonces intocables capos de la droga y su peligrosa organización. Finalmente los superiores del policÃÂÂa tendrán que reconocer su hazańa.